19/03/2024
Cazadnos las zorras

«Cazadnos las zorras, las zorras pequeñas, que echan a perder las viñas; Porque nuestras viñas están en cierne. » Cantares 2:15.

Los israelitas asociaban al zorro con el chacal. El zorro se reconoce rápidamente por su astucia y su aptitud y por ser un carroñero. Se alimenta de los despojos de otros depredadores. Su imagen en la Biblia esta asociada a la devastación, la infidelidad y el engaño.

«Aquel mismo día llegaron unos fariseos, diciéndole: Sal, y vete de aquí, porque Herodes te quiere matar. Y les dijo: Id, y decid a aquella zorra: He aquí, echo fuera demonios y hago curaciones hoy y mañana, y al tercer día termino mi obra.» Lucas 13:31-32.

Ezequiel lo pinta de una manera hermosa: “Chacales entre las ruinas: ¡eso han sido tus profetas, Israel!”, Se deja muy claro que los profetas no realizaron su trabajo con justicia para edificar la casa de Israel. Vivieron practicando el engaño y la trampa como los zorros.

Llevar el evangelio a regiones de nuestra alma donde no haya llegado. Dejar que El Espíritu Santo ensanche nuestra sabiduría y conocimiento del Padre Celestial. Describen  la conquista de nuestra tierra interior.

A veces pensamos que las raíces más profundas de nuestra conducta son cuestiones complejas de nuestro carácter. Situaciones sin resolver. Aspectos que identificamos y reconocemos que deben ser tratados. No lo hacemos por ignorancia o temor.A veces un poco de las dos. En su mayoría es lo que tratamos de ocultar. Nos avergüenza. Sabemos que están ahí. Son parte de nuestro problema. Gigantes a vencer. Montes a mover.

Todo comenzó con una pequeña zorra. Algo aparentemente sin importancia. Se presento en un momento en cierne. La frase en ciernes significa que algo está ‘en fase de elaboración o de formación, o sin haber madurado:

Las cosas sencillas, las cotidianas, aquellas aparentemente sin importancia son las que expanden más profundamente el daño, Se manifiestan continuamente. El evangelio no las influencio.

Malas actitudes. Gestos. Todo tipo de reacciones contrarias al carácter de Cristo. Palabras que brotan de nuestro corazón. Cada una envuelta por la unción espiritual del espíritu que las promueve.

Cuanto más oramos en el Espíritu más ministramos lo de Dios. De lo contrario nuestra mente es influenciada por esas presencias espirituales que buscan donde mejor se pueden esconder para realizar su obra devastadora. En lo aparente. Sin importancia. En lo cotidiano. Lo rutinario. Lo que ministra a nuestra vida con regularidad e influencia a quienes nos rodean.

Son las zorras pequeñas de las que nos habla la palabra, esas que nos socavan de una manera imperceptible. Nos atacan en el momento justo de nuestro crecimiento. Cuando estamos verdes y en pleno desarrollo.

Cada día encuentro que la oración es la llave de todo. Algo que cuesta hacer en forma disciplinada. Que abre la puerta a la transformación espiritual. Dios siempre trabaja en el interior para que, a su perfecto tiempo, su obra se haga manifiesta. Visible.

Enseñarnos a cazar a estas zorras pequeñas forma parte de la estrategia de Dios para enseñarnos a vivir en la madurez de su conocimiento. En el caso del versículo que estudiamos se esribe de forma imperativa. No es opcional. “CAZADNOS LA ZORRAS, LAS ZORRAS PEQUEÑAS”.

Hacélo. Nos dice el Señor. Es nuestra responsabilidad. Es una lucha en la mente. Son pensamientos. Los cazamos con Su Palabra. Dios nos equipó con las armas espirituales. A sus discípulos. Los seguidores. Les da poder y autoridad. El espíritu de sabiduría y revelación en el conocimiento de Él. Somos cada uno de nosotros los que debemos cazarlas, tomar posesión y llevarlas cautivas a la obediencia a Cristo. Esta es la forma de eliminarlas de nuestras vidas.

Transformate por medio de la renovación de tu entendimiento. Nuestro Padre Celestial nos equipo con un espíritu de poder, de amor y de dominio propio. Que la paz de Dios sea la que gobierne tu corazón. Dios te fortalece para poseer la tierra que el te dió. El fin de nuestra fe que es la Salvación de nuestras almas.

About The Author

2 comentarios en «Cazadnos las zorras»

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

%d